Esperando a un amigo [Mitch]

El vuelo había sido tranquilo, pero muy aburrido, me había dedicado a jugar a jueguecitos de mi celular, como un crío, supuse que se debía a que ya estaba harto de aviones y aeropuertos, acababa de volver a L.A. después de dos años y ya me había ido de nuevo.... no sabría en mi vida algo mas que el ser nómada. Bajé del avión y caminé por aquel extenso pasillo de desembarque arrastrando mi maleta y con una mochila colgada al hombro, sin olvidarme de mi reproductor de música. Cuando salí me detuve al verla allí sentada distraida y leyendo, con una sonrisa di una pequeña vuelta para nos er visto y me acerqué por detrás, subiéndome de rodillas al asiento al que ella daba la espalda y rodeando sus hombros con mis brazos para decirle con una gran sonrisa.
-¿A quién espera una chica tan guapa?-dije como un niño pequeño emocionado.

Off:Me tengo que ir un rato, luego vuelvo.

La lectura había dejado de ser interesante, la sección de chismes no era lo mio. Mi humor era lo suficientemente bueno para arruinarlo con tontos chismes, así que rápidamente me pase a la sección "Moda". De tanto en tanto miraba hacia la puerta de llegada para ver si podía encontrar a Mitch, pero nada. Hubieron unos segundo en los cuales me distraje y en cuanto me quise dar cuenta tenía a alguién abrazandome por detrás. No pude evitar reconocer esa vocecita, si, sin dudas era mi amigo Hewer. -Espero a un amigo, algo sin importancia- dije sin mover un pelo siguendo la lectura de la revista. Aunque no me pude aguantar, a los pocos segundos voltee para ponerme en la misma posición que él y luego de besar cariñosamente su mejilla y abrazarlo con fuerza -Hasta que te decisdiste- reí sin haberme separado de él.

Off: No hay problema ^^

Observé su reacción,viendo que permanecía centrada en la lectura. Escuché con atención sin dejar de sonreir.
-Pobre de tu amigo el poco importante, que cruel de tu parte pensar de él así.-dije frunciendo los labios de una forma graciosa y cuando se giró para abrazarme me sorprendí y dejé los brazos muertos un instante, volviéndola a abrazar de inmediato.-No me decidí, me obligaste Anderson.-bromeé.

-¡Mentira!- le reproché separandome -Que tu seas un dominado y te dejes convencer por mi es otra cosa- bromeé -Ahora dime, ¿cómo estuvo tu vuelo?- siempre viajar en avión es cansador, pero ahora no había lugar para descansar, todo lo contrario. -Me extrañaste ¿cierto?- agregué

Sonreí y de nuevo me tomó por sorpresa cuando se separó de golpe, era sin duda hiperactiva, la miré aún con aquel gesto de tonto y luego sonreí.
-No soy un dominado tu eres una embaucadora.-le reproché bromeando agarrando la punta de su nariz con los dedos para luego soltarla.-Estuvo aburrido, ya estoy demasiado acostumbrado, dos años de aqui para allá son muchos.-dije suspirando y al escuchar su última pregunta suspiré y poniendo gesto aburrido desvé la mirada ladeando el rostro.-Quizás, aunque creo que no, ¿y tú a mi?

Lo escuché atentamente, por su expresióm me imaginé que estaba pensando que era una loca, pero bueno, así era yo. -¿Embaucadora yo? Si, si, seguro.- puse mis ojos en blanco -Lamento que haya sido aburrido tu viaje, pero siendo sincera te lo merecias, me dejaste mucho tiempo sola por tus viajecitos- era cierto, me había hecho mucha falta en todo el tiempo que no había estadp, pero ahora era todo diferente.
-Yo iba a decir que te extrañé mucho, pero con esa respuesta desalentadora de tu parte, se me fueron las ganas de extrañarte- me crucé de brazos como una niñita caprichosa

Me reí al ver aquella expresión que tan bien conocía en su rostro, el cual había pensado durante tanto tiempo que conocía a la perfección y ahora me daba cuenta de lo mucho que había cambiado, llevé una de mis manos a su mejilla un poco atontado de seguro por el vuelo y luego al ver mi propio acto le tiré de la mejilla levemente.
-Parece que hables de tu enamorado que se fue a la guerra.-bromeé sin poder evitarlo-Oh, vamos, solo fueron dos años y me despedí, peor hubiese sido sino lo hubiese hecho, dijiste que estarías bien y pues...te creí.-le dije sonriendo y encogiéndome de hombros.``Solo fueron dos años´´ demasiadas cosas habían cambiado en aquel solo.-Y ahora que recuerdo prometiste que no llorarías, no lo hiciste ¿verdad?-pregunté.-Sabes que me habría quedado, pero era una buena oportunidad.-expliqué.-Me echarías de menos incluso aunque me fuese ahora, soy el único Hewer del mundo, el único rubio insoportable que tienes y al que adoras...o eso espero.-dije después pensando en mis palabras, con una leve sonrisa.-Pero me esperaba al menos un beso de bienvenida.-bromeé riendo.

En ese tiempo que no nos habíamos visto muchas cosas habían cambiado. Excepto el cariño inmenso que sentia por el. Era mi mejor amigo, lo adoraba y lo adoraría siempre.
-Eres mi "enamorado" amigo, te fuiste, mi mejor amigo se marchó- dije bajando la mirada -Lo sé, te despediste, yo prometí que no lloraría, pero eso no quiere decir que iba a dejar de extrañarte y necesitarte- aunque me doliera, me había hecho falta, le quería mucho -Te quiero- dije besandole tiernamente la mejilla y volviendo a abrazarlo -Nunca me vuelvas a dejar- susurré en su oido

La miré con más seriedad, porque apesar de hablar en un intento bromeante aquello había sido serio una vez. Sí, me había ido y no había sido justo para ella porque la había dejado sola, sin preguntarle si me necesitaba o si le importaba, había sido de alguna forma egoista, pero después de todo lo que había pasado aquello había sido una oportunidad, no solo para mi carrera, sino también para mi mismo, para olvidar, recordar, o pensar en muchas cosas, las cuales algunas se habían aclarado y otras seguían como estaban. Vi como bajaba la mirada, me sentí culpable y me di cuenta de que nunca antes me había disculpado, quizás porque nunca me había reprochado nada aún teniendo razón si lo hacía...Ni siquiera había llamado o mandado e-mails, me había absorto en alejarme todo lo posible de L.A. para volver después, no sabía muy bien si siendo el mismo o habiendo cambiado.Tomé su mentón e hice que alzase el rostro levemente,inclinando un poco mi cabeza buscando su mirada aún escuchándola. Besó mi mejilla y abrazándome dijo aquello que tanto había necesitado durante dos años...no temía que Niki me mintiese, ella siempre era sincera y de no ser así lo cierto es que me daba igual en aquel momento porque la creería. La abracé también.
-Lo siento Niki, debí haberlo sabido...no me habría ido, pero creeme que era necesario...-le dije aún abrazándola con un poco más de fuerza, cerrando los ojos un instante.-¿Me prometes que seré siempre tu ``enamorado amigo´´?-le pregunté de una forma inocente, aún sin soltarla.-También te quiero Niki, mucho.-le dije con sinceridad en un susurro, algo timido ya que no solía decir cosas como aquellas, venciendo finalmente aquella timidez.-Nunca más, te lo prometo...-dije y le di un suave beso en sus cabellos sin soltar el abrazo.-...a no ser que tu me lo pidas.-le dije consciente de lo que decía.

Era dificil todo aquello, ¿qué no es difícil? Me sentía un poco egoista en reclarmarle lo de su partida, tenía que ser conciente que el mundo no giraba a mi alrededor y de que él también tendría sus planes, oportunidades increíbles, que de seguro no iba a dejar por mi causa. Así que poco a poco el sentimiento de tristeza que predominaba en mi, se volvía un sentimiento de culpa. Me sentía una mala amiga. -Perdoname tú a mi, he sido un tanto egoista- dije separándome lentamente. Ahora lo importante era que él estaba aquí, junto a mi y no quería hechar a perder, si es que ya no lo había hecho, ese momento. -Lo prometo- dije mientras una pequeña sonrisa se dibujaba en mi rostro -Siempre serás mi "enamorado amigo" pase lo que pase- agregué para luego continuar escuchandolo con mucha atención -¿Estas enloqueciendo? Nunca te pediría que te fueras- No tendría el valor de pedirle que se alejara otra vez, aunque si aceptaría, por más que me doliera mucho, que se alejara. Mitch ya era parte de mi, era mi familia, mi hermano, mi amigo, hasta mi enemigo en ciertas ocasiones. Era alguien en quien podía confiar plenamente, siempre me aconsejó y me dijo la verdad, por más que doliera, era capaz de hacerme abrir los ojos ante circunstancias difíciles. -Es bueno saber que siempre voy a poder contar con alguien como tu- dije siencera -De esa forma nunca me voy a sentir sola- agregué por último

Sentí como se alejaba y en mi rostro se formó casi involuntariamente una sonrisa, no quería preocuparle, sabía como de aprensiva era y que se preocuparía o autoculparía si no me veía bien.Le sonreí en un gesto amable.
-No es egoista querer estar con tu mejor amigo, sino yo soy el grandísimo rey del egoismo.-dije riendo al decir lo último.-Además me gusta que me quieras contigo, ¿quién más es capaz de aguantar a Hewer durante tanto tiempo como tu lo haces?-le dije sonriendo e imitando la voz de i padre cuando me regañaba.-Eso me tranquiliza, tendré mi puesto a salvo si me voy alguna vez y luego vuelva...-dije.-Siempre, cuando me necesites y cuando no, para romper caras si te hacen daño.-reí.-Quizás si me este volviendo loco ¿sabes?, por que no entiendo nada de lo que me pasa ultimamente.-reí de una manera irónica.

-Si en eso tienes razón, soy la única valiente que te aguanta 24hs seguidas- reí dandole la razón -Que tengas tu puesto guardado, no quiere decir que te vas a marchar pronto ¿cierto?- pregunté esperando una respuesta a mi favor -¿Ultimamente?- dije confundida -Tu y yo tenemos que hablar seriamente- me paré sobre el asiento para cruzar hacia el otro lado, donde estaba Mitch y sentarme cómodamente, la posición anterior me estaba matando -¿Qué es lo que te pasa "ultimamamente? Que estas loco ya lo sabía, pero ¿hay algo que quieras contarme?- pregunté

Observé como se sentaba a mi lado e hice lo mismo, acomodándome en el asiento de su lado.
-No, no voy a irme...no se a donde de todos modos...puedes estar tranquila...y si me voy...pues, esperaré a que estes dormida...-expliqué con la mirada fija al frente y una leve sonrisa apenas perceptible.-Es todo...alguien me confesó sus sentimientos por mi...

Mientras escuchaba lo que decía le miraba atentamente. Parecía hipnotizado mirando a la nada. -Eres malo- comente sonriente, al parecer todo había vuelto a la normalidad. -¿Quién es?- pregunté casi en un grito cuando me dijo que alguien le había confesado sus sentimientos hacia el.

Escuché sus palabras e inclinando la cabeza hacia un costado sonreí con levedaz y la miré.
-Sí, lo soy, pero duele menos si no hay despedidas ni palabras de por medio.-dije y luego le coloqué con rapidez una mano en la boca para que se callará.-Shh, Niki, los paparazzis siempre andan cerca...aunque en realidad ya deben de estar expeculando sobre nosotros ahora mismo...a quien le importa, dejemos que rumoreen sobre nosotros, así es más divertido.-dije con una sonrisa traviesa y aparté mi mano de sus labios, sonriéndoled y acercándome a su oido.-Megan.

El bueno de Mitch no me dejó pronunciar palabra alguna cuando ya estaba tapándome la boca con su mano. Después de hablarme y que yo lo escuchara decidió soltarme. -¿Sobre nosotros?- pregunté -O sea tu y yo- reí, si que era una idea loca no tan loca. Luego de eso pronunció aquel nombre. Un momento, ¿MEGAN? grité para mis adentros, wooooooow, mi prima no dejaba de sorprenderme. -No lo puedo creer- dije sorprendida -Te lo dije una vez, donde hubo fuego, cenizas quedan-

Me aparté y me crucé de brazos dejándome resbalar sobre el asiento levemente.
-Si, sobre nosotros.-le dije, no me importaban los rumores, al contrario me encantaban porque eran divertidos y a veces tan increibles que no sabía de donde sacaban tanta imaginación.No era tan raro que rumoreasen sobre nosotros ya que pasabamos bastante tiempo juntos.-Si...pero el problema es que yo estoy confuso...

-¿Confuso?- pregunté confusa (xD) -Ahora que lo pienso, todos esos días que yo te confesaba mis sentimientos y te decía quién me gustaba, tu no fuiste capaz de decirme algo- dije recordando -Me refiero a que nunca me dijsite quién te gustaba ¿Acaso no confias en mi?- realmente temía a la respuesta de esa pregunta -Anda Hewer, cuentame, sabes que no voy a decir nada-

La miré atónito cuando dijo aquello.
-Nada deeso Niki, lo sabes, te lo contaría todo, pero ese es el problema que no se que siento...llevo tanto convinciendome de algunas cosas que ya no estoy seguro de otras.Te he contado lo de Meg y eso que es tu prima...y esta claro que no te gustará si la daño...creo que es bastante prueba de que confio en ti...Estoy confuso...

-En eso tienes razón- asentí con la cabeza -Pero ¿tu confusión se debe a que hay otra persona ó a que no estas seguro de lo que sientes por ella?- esos eran dos factores totalmente diferentes. Una cosa era cuando no estabas seguro de lo que sentías por cierta persona y otra muy diferente era el hecho de que entrara una segunda y complicara, además de confundir, todo...

La miré aún más sorprendido, no se le escapaba una y eso a la vez me hacía pensar que no hacía falta si se lo contaba ya que ella siempre lograba deascubrir que pasaba por mi atolondrada cabeza o mi lioso corazón.Me froté la nuca con una mano y después revolví mi pelo, inclinándome hacia alante mientras apoyaba mis antebrazos sobre las rodillas.Suspiré sin mirarla.
-Ambas cosas...siempre he querido a Meg, ¿quién no lo sabe?, no hace tanto que acabamos...estuve loco por ella...pero eso no evito que cometiese mis errores...me gané a la fuerza que se alejara de mi y me odiase, alejé de mi a la persona que más amaba...la herí...y sin embargo me ha perdonado como pensé que nunca haría, sin saber si me lo merezco...siento cosas muy fuertes por ella...visto esta que la besé...-dije intentando explicar todo cuanto sentía en aquel momento.-Meg me ha perdonado y eso me hace muy feliz, pero no quiero volver a herirla...-dije estaba vez y ladeé un poco el rostro para observar su expresión.-Y...luego comienzo a sentir cosas por otra chica...no hubiese sido justo si me hubiese lanzado a los brazos de Megan sin estar seguro eso en definitiva habría sido lo peor y la habría herido como deseo no hacer...

Me había convertido realmente en una amiga acosadora, me gustaba saber todo. Tal vez de ese modo podría ayudar a mis amigos, aunque también temía a aburrirlos con mis tontos cuestionarios. En fin, me crucé de brazos para escuchar atentamente a Mitch. Era cierto, Meg lo había llegado a amar mucho, tal vez demasiado, y que ahora rectificara ese "cariño" hacia él, me dejaba pensando en muchas cosas.
-Te entiendo- dije en un suspiro -Estoy segura de que lo último que quieres hacer es lastimarla- él también la quería y ponía las manos en el fuego que lo menos que quería era que volviera a ser lastimada. Ella había sufrido mucho, lo sabía mejor que nadie, siempre estuve al lado de ella para apoyarla. Me sorprendí mucho cuando dijo que había otra chica por la cual sentía cosas -¿Se puede saber quién es?- pregunté sin poder aguantar más la curiosidad. Mitch me había dicho que confiaba en mi, pero ¿sería capaz de decirme quién era la otra persona? -No estas obligado a decirmelo ya sabes- sonreí levemente -Pero realmente me gustaría saber quien a robado parte del corazón de mi Hewer- dije divertida -Ya sabes que soy algo celosa, pero de todas formas quiero saber- bromeé

Sonreí bajando la mirada según atendía a sus gestos y sus palabras, de nuevo alborotándome el pelo e inclinándome hacia alante, no sabía muy bien si por vergüenza por hablar sobre unos sentimientos tan complicados, por que hablaba de herir a su prima o por mera costumbre.
-No.-dije entonces.-No puedo decirtelo, es amiga de Meg y ni siquiera ella lo sabe...se preocuparía, le haría demasiado daño...no quiero lastimar a Meg, pero tampoco a la otra chica, se que si le digo será doloroso para ambos y no quiero estropear nada que para mi es ya perfecto. No se que siente
ella respecto a mi, pero tampoco pretendo saberlo aunque me intrigue demasiado...además pienso que ella solo me ve como amigo, lo cual es un poco frustrante para mi, pero bueno...no siempre se tiene todo...-expliqué después sentándome hacia atrás e inclinando la cabeza del mismo modo y sonriendo con levedaz.-Nah, no se puede tener algo que no se sabe, así que no tiene nada, al menos que ella sepa porque yo se que me falta.-bromeé.-Sigo siendo todo tuyo Anderson, ya te dije que siempre serás mi chica. MI chica favorita.-sonreí.

-Eres miedoso Hewer- reí mientras miles de nombres pasaban por mi mente, tratando de averiguar quien era la afortunada de tener una parte importante del cariño de Mitch -No deberías tener ese "miedo" o lo que sea de decirle lo que sientes, si, comprendo que sea amiga de Meg y que no quieras herirlas, pero te estas haciendo un terrible daño a ti mismo, se que no soy una experta en relaciones, siendo sinceros soy un desastre en el amor, pero supongo, es mas, estoy segura que retener algo que sientes y solo poder compartirlo contigo mismo debe ser malo- no era que quisiera que me lo contara aunque en realidad moría por saberlo, era casi una necesidad, pero yo solo quería ayudar y no me parecía nada bueno que se callara aquel sentimiento. El querer a alguien es una cosa hermosa y el no saber que eres querido me enloquecería. -Tal vez si me cuentas te puedo ayudar- insistí inconcientemente. No quería presionarlo pero hab’a algo dentro de mi que me hacia decir cosas que tal vez no quería. Ya cansada de la misma posición, cruce las piernas al estilo "indio" encima de la silla y me perdí mirando como la gente iba y venia con sus valijas. Ahora que lo recordaba aun seguíamos en el aeropuerto, pero no pensaba arruinar la charla. Sacudí levemente la cabeza para luego volver mi mirada al rostro de Mitch -A mi me sucedió algo parecido con un chico, hasta que yo no le dije lo que sentía hacia el, no me entere que ese cariño era correspondido, si no hubiese sido por mi "valentía"- reí ante mi muy tonta expresión -Tal vez nunca me hubiese enterado y nunca hubiésemos vivido momentos inolvidables- suspire recordando con algo de tristeza todo aquello -Si bien no funciono, al menos lo intentamos- revolví tiernamente su pelo como el lo había hecho anteriormente -Me alegra ser tu chica favorita, y espero ser la única por mucho tiempo, ese lugar me lo he ganado con mucho esfuerzo- bromee mirando a la nada con una pequeña sonrisa, en ese momento prestaba poca atención a lo que decía y me hundía en mis propias ideas y pensamientos.

Suspiré y terminé por reir cuando despeinó mi pelo aún más.
-Miedoso, cobarde,estúpido...hay muchas palabras para definirme en esta situación, pero también conservador o inteligente aunque sea contradictorio...-dije mirándola.-No hay nada que hacer,acabaré por aclarar mis sentimientos sean cuales sean por mi mismo, quizás sea mejor que no sepa...-dije resignado.-No te imaginas como me siento hacia cada una...son tan contrarias...y sin embargo las dos se han hecho muy importantes, no puedo evitar pensar que dañaré a una de las dos sean o no correpondidos mis sentimientos o que terminaré por perderlas-confesé.-¿Y si volviese con Meg, Niki? que pensarías.-dije y la miré fijamente buscando su respuesta.-¿Y si eligiese a la otra chica? ¿qué pasaría entonces? ¿qué pensarías?-pregunté.-No quiero perder a ninguna, si eso es lo que veo que ocurrirá me quedaré solito, ser soltero no es malo, es más amo mi libertad.-terminé por bromear.-Aspiro a ser soltero de oro. Soy un corazón solitario, sin ataduras, puedo disfrutar de la vida...es lo que he hecho estos dos años d aquí para alla.

-Si regresas con Meg- suspiré -No lo sé, ehmm, ¿te felicitaría? ¿pasarías a ser mi primo y a la vez chico favorito?- reí -Y si eliges a la otra chica, sería lo mismo, sacando lo de primo segurías siendo mi chico favorito. Estes con quien estes, inclusive si te quedas soltero para el resto de tu vida, siempre voy a estar ahí para ti- Si bien me interesaba y podría llegar a preocuparme quien es o será la novia de Mitch, mis sentimientos hacia él no cambiarían -Pase lo que pase, unidos para siempre- reí -Soltero o no, eres una exelente persona y me siento privilegiada de ser tu amiga, y no tengas miedo de lastimar a alguien, a veces hay ciertas cosas que no se pueden evitar, por más que intentes, es imposible no lastimar a alguien o a ti mismo-

Le sonreí y alargué mis brazos sobre el respaldo de los asientos, ocupando también el suyo mientras la miraba.
-Me alegra saber que ese es y siempre será mi lugar, es ahora, lo único que tengo seguro en mi vida por el momento, eso y tu apoyo.-le dije con una sonrisa tierna.-Si alguna vez no tengo a donde regresar ire a tu casa y pediré asilo, no podrás decirme que no porque soy tu favorito.-reí.Me preguntaba que haría yo si Niki tuviese novio, ya lo había tenido, pero nunca habíamos coincidido los tres en un mismo lugar...seguramente estaría celoso o en plan protector, después de todo Niki era como mi hermana y no me servía cualquiera para ella, me pesase o no la quería para mi solo, era un comportamiento infantil, pero ¿cuando no lo eran los celos?, el chico tendría que acercarse a la perfección para tener mi visto bueno, aunque si ella era feliz ya lo tendría.

-Claro que siempre tendrás un lugar en mi casa- dije recostando mi cabeza en su pecho -Y no soy lo único que tienes, también tienes mi amor, mi apoyo, supongo que deben haber más amigos, aparte de mi que están contigo en todo momento- suspiré. Luego de eso se formó un silencio algo incómodo para mi. Supuse que Mitch estaría en su mundo, pensando en algo, así que como de costumbre no aguanté la curiosidad -¿En que piensas Flufi?- bomeé

Se apoyó contra mi y recosté mi cabeza sobre la suya, pensativo.
-Quizás, pero quien es capaz de aguantarme más de veinticuatro horas seguidas solo eres tú.-afirmé sonriendo y de nuevo me dejé llevar a mi mundo hasta que de nuevo sentí su voz.-Pienso en que quizás tienes razón, pero quizás no, pienso en todo un poco...¿y tú Nushi?