Fiesta en la playa (Niki)

Pasé a recoger a Niki a las diez en punto como había dicho, y después ambos habíamso caminado hasta la playa en la que había todo aquello montado, una fiesta. La música sonaba a gran volumen, haciendo casi retumbar el suelo, luces y antorchas, olor a alcohol y mucha gente bailando al son del ruido.Aquello si era una fiesta.
-¿Qué te parece?-le pregunté con las manos en los bolsillos.

Mitch fue puntual cuando pasó a buscarme y ambos nos fuimos caminando hasta la playa. Cuando llegué miré a mi alrededor. Toda la gente, las risas, los vasos de aquí para allá, todo era estupendo. Sin duda no me arrepentía de haber venido. -¿Bromeas? Esto es genial- dije con una gran sonrisa mientras miraba embobecida a mi alrededor -Gracias por invitarme- volví la mirada a su rostro

Sonreí complacido.
-No podía perdérmelo, ni podía dejar que te lo perdieses.-declaré orgulloso del descubrimiento.-¿Preparada para coger una de esas borracheras de las que no cogemos desde hace mucho juntos?-dije riendo.-Advierto que quizás en lugar de tener que cargarte a espaldas para volver yo, quizás tengas que cargarme tú.-bromeé.

-Me asustas- reí -Pero estoy lista para todo, no me quiero imaginar donde terminaremos esta noche- bromeé -¿Que esperamos para empezar?- tomé su mano y comencé a caminar hacia la barra emocionada -Esto si que va a ser divertido- sonreí

Me reí ante su comentario y cuando tomó mi mano para llevarme con ella comencé a correr y terminé por arrastrarla yo hasta la barra.
-Bebe lo que puedes linda, yo te invitó, y esto es solo una vez en la vida.-dije fiestero pidiendo ya mi primer trago, el primero de muchos esperaba. Aquello sería divertido.

Finalmente Mitch terminó por llevarme a rastras para la barra, realmente iba a ser una buena noche -Estas generoso hoy- reí y pedí un trago, el más fuerte que tenían ahí -Esto es por ti- dije haciendo fondo blanco. No pude evitar hacer una mueca algo extraña, realmente era fuerte, sentía que mi pecho ardía, luego vino un pequeño mareo seguido de la sensación de bienestar -Si!!!!!!!!- grité elevando los brazos, feliz por mi hazaña

La miré, pasándole el vaso al camarero.
-Aprovecha, no soy siempre así, el bar generosidad estará mañana cerrado por vacaciones.-bromeé.-O por resaca.-culminé. y luego vi como se tomaba aquello de golpe lo cual no supe como le sentaría y al ver que lo conseguí le aplaudí.-Ponme lo mismo que a ella.-le pedí al camarero.-Espero no saber ni quien soy cuando la noche acabe.-bromeé.

Dejé mi vaso de lado y pedí otro trago igual -¿Resaca?- reí -Si salimos vivos, considerate afortunado- bromeé mientras tomaba, esta vez lentamente un poco de mi trago -Gracias público, gracias- dije al escuchar sus aplausos -¿Y si abusan de mi en mi futuro estado?- pregunté entre risas -Tienes que estar lúcido para protegerme-

El camarerro me sirvió el vaso y lo observé, no sabí exactamente que era, pero si mi amiga la ``bebedora´´ lo había bebido de un trago supuse que yo también podría, antes de beber la escuché con atención y me reí.
-Me ofendes princesa, esta claro que si alguien trata de hacer algo indecente contigo le partiré la cara.-dije orgulloso y mirándola mientras alzaba una ceja fingiendo estar levemente ofendido por su duda.-te protejo constantemente aunque no lo creas, no actuo porque nunca estas en peligro, pero estoy atento...es mi debes como...¿mejor amigo casi como un hermano sobreprotector?-dije esto último dubitativo y entrecerrandolos ojos mientras desviaba la mirada un instante pensativo para decir lo último ya que no sabía que decir exactamente. Luego miré mi vaso de nuevo.-Bien, entonces, por ti.-dije le de un trago, el único necesario para acabar el contenido del vaso como Niki había hecho. Respiré cuando separé mis labios del vaso, sintiendo como hacía burbujas en mi lengua y ardía en mi garganta y una sensación de hiperactividad que me encantaba me invadía, miré a Niki con los ojos como platos.-Woooooooooau, ¿qué demonios es esto? ¡me encanta!-dije sabiendo que no tardaría en estar borracho si bebía más de eso. Dejé el vaso energicamente sobre la barra, casi rompiéndolo.-¡Otro!-pedí.

-Ahora tengo super heroe- bromeé -Súper Hewer al rescate- dije terminando de vaciar mi vaso y pidiendo otro igual -Es bueno saber que alguien te cuida aunque tu no lo sepas- sonreí para luego escuchar el "por ti" y ver como se bebía el trago. Por su expresión suspuse que le había causado el mismo efecto que a mi. Ya no lo dudaba, unos minutos más bebiendo de eso y no estaría en pie. -Eso es el sabor a la libertad y diversión- contesté a su pregunta riendo. Inmediatamente pedí dos tragos más para mi y los tomé como agua, ya me había acostumbrado a ese ardor en mi pecho, ya no me importaba -Ya me siento borracha- sacudí levemente la cabeza

Me reí cuando dijo aquello y vacié el vaso de nuevo.
-Aunque eres la chica que no teme a nada, así que no necesitas protección de nadie...le pegarás una buena paliza a quien intente hacerte algo.-dije y pedí otro vaso más que no duró mucho, pedí un quinto.-La libertad y la diversión son mi nueva bebida favorita-declaré.-Creo que yo también.-reí hiperactivo.-¡Si estas borracha baila!-canté.-¡Camarero quiero la botella!-dije dando una palmada en la barra.

-¿Enserio quieres que baile?- pregunté con una sonrisa algo maléfica -Si eso quieres- pedí otro trago y lo vacié bastante rápido. Con algo de dificultad me subí encima de la barra y miré a Mitch de reojo para ver su expresión. Después de respirar profundo comencé a bailar encima de la barra al ritmo de la música, llamando la atención de los demás que estaban ahí. -¿A qué soy buena?- le pregunté a Mitch aún bailando para luego quitarle la bebida a uno de los borrachos que por ahí estaban y beberla -Ven conmigo- dije con una gran sonrisa -Atrevete Hewer- insistí

Le di un targo a la botella, pensando que quizás fuese el amor de mi vida. Entonces Niki habló y vi como se subía a la barra incrédulo y empezaba a bailar, incluso quitándole la bebida a otro borracho.Me crucé de brazos y luego le aplaudí.
-Eres increíble Anderson, solo era una canción.-reí.-¿Estas loca?, no, claro, solo borracha.-dije mirandola bailar aún.-¿Me retas?, soy bailarin preciosa.-dije y me subí a la barra de un salto, para empezar a bailar con ella.-¿Quién es bueno?

-Claro que te reto Hewer- dije riendo como una tonta, mejor dicho, como una borracha. Luego vi como Mitch también se subió de un salto a la barra, realmente no crei que se fuera a animar -Si que me sorprendes- me acerqué a el y besé su mejilla -Eso es por ser valiente al igual que yo- bromeé mientras seguía bailando -Realmente eres bueno- admití

Me reí aún bailando, la gente nos miraba y algunos trataban de imitarnos en la arena, otros aplaudían mientras los demás seguían bebiendo.
-¿Lo dudabas?-dije con extremada eufória.-No me niego a nada divertido.-declaré.-Oh, tengo que ser valiente más amenudo.-reí.-Me merezco que grites algo sobre mi.-reí bromeando.

-Sinceramente si lo dudaba- reí -¿Algo sobre ti?- dije confundida -Bueno aqui vamos- dejé de bailar e intenté concentrarme en lo que iba a decir -Atención!!!- girté -Este es mi mejor mejor amigo Mo, Mu, Ma ¿cómo era? ah, si, Mitch- lo señalé -Hace dos años que no lo veía y de la nada volvió- reí -Fue novio de mi prima, y ahora está supuestamente "enamorado" de una chica- lo miré -Y no quiere decirme quien es ¿ustedes creen que merezco eso?- esperé unos segundos para luego escuchar a las personas diciendo "no lo mereces" -¿Ves? La multitud habló- dije con una sonrisa de satisfacción

Me reí cuando lo hizo porque realmente bromeaba.
-Me tomas demasiado en serio cuando bromeo, se nota que estas borracha.-reí y le di un nuevo trago a mi botella.-Que insistencia Anderson.Me gustasba el principio.-reí.-Sepa la multitud que la señorita esperará a que se cumpla el orden establecido.-reí.

-Arruina momentos- le arrebaté la botella de las manos y con ayuda de un chico que allí estaba me bajé de la barra y me volví a sentar en uno de los bancos apoyando ambos brazos sobre el mostrador y arriba de ellos mi cabeza -Quiero llorar, quiero reir, quiero bailar, me quiero morir, quiero vivir, quiero al chico de al lado, no sé lo que quiero- me quejé mientras lentamente me acomodaba en una posición normal y bebía un poco de la botella -¿Sabes? Al diablo con tu maldito orden- le grité a Mitch -Ahora ya no quiero saber, no me interesa, es más nunca me interesó- desvarié

Me arrebató botella y mostré un rostro triste y sorprendido, cuando la escuché reí y luego me tumbé sobre el mostrador panza abajo, para apoyar los brazos sobre la barra y la cabeza sobre las manos mientras le miraba con inocencia.
-Lo dices ahora.-dije y le quité la botella.-Esta es mía.-dije y bebí, para darme cuenta que se había terminado.-¡Ah, el amor de mi vida me ha abandonado!,¡ como todas...era de esperar como siempre!-dije y fingí que lloraba agachando la cabeza sobre mis brazos.-¡Otra camarero!-sollocé.

No pude evitar sonreir cuando vi que se tumbó sobre el mostrador como en una cama -Tu me invitaste, estas son las consecuencias- dije mientras veía como me sacaba de las manos la botella que practicamente estaba vacía -¿Ahora te has enamorado de una bebida?- pregunté algo confundida, mi estado no daba lugar a pensar mucho -Vamos Mitch, no llores- dije arrodillandome sobre la banqueta y abrazandolo a él -Me vas a hacer llorar a mi también- besé suavemente su mejilla

Tomé de nuevo la botella que el camarero me tendió y le di un trago.
-No lloro, ¡solo llueve de mis ojos!-dije semi riendo y abrazándola también luego miré a la botella.-Tu serás mi nuevo a mor, no me abandonarás como la antigua...-sollocé.-Escucha Niki, incluso la botella me rechaza, me replica, no hemos ni empezado y ya tenemos problemas de pareja.-dije atontado.-Es una mala botella, ya no la quiero.

-Las botellas son todas iguales, traicioneras, pero si tu nuevo amor es una botella el mio será la playa- dije pidiendole al camarero que me diera una botella de aquella extraordinaria bebida -Me voy con ella- dije separándome de Mitch y comenzando a caminar lejos de la fiesta -¿Vamos?- me detuve y le hice una seña para que me siguiera -Tienes que ser mi padrino de bodas- reí tontamente -Aparte, me tienes que explicar una cosita Flufi- dije comenzando a caminar nuevamente a tropezones.

La miré con gesto desalentado y di un nuevo trago, me reí y bajé de la barra de un salto, dando un traspie para seguirla alejándonos de las luces de las antorchas y de la fiesta, acercándonos al mar y a la única luz, la lunar.
-¿Casarte tan joven? que despercicio, ya no seras codiciada.

Cuando estuvimos lo suficientemente alejados de la fiesta me senté en la arena mirando el agua con el reflejo de la luna en ella. Era una noche perfecta -¿Quién me querría aparte de un trozo de agua y arena? Soy insoportable, por eso mi novio me dejó- dije tomando un trago considerablemente grande de mi botella -Soy un desastre, inclusive borracha-

Me senté junto a ella, auqneu luego me dejé caer, tumbándome, mientras una de mis manos jugaba con su pelo y luego seguí con un dedo el recorrido de su espalda.
-No eres nada de eso, lo sabes...y muchos chicos se mueren por una oportunidad contigo Niki, eso tenlo por seguro.No diré que él era un estúpido o que no te merecía porque si le querías es por algo.

Sentí como jugaba con mi pelo, no pude evitar que mi piel se pusiera como la de una gallina al sentir su dedo por mi espalda, así que lentamente retiré su mano de ahí y me recosté en la arena al igual que él -¿Tu crees? Yo no conozco a nadie así- suspire -Me estoy cansando de esperar, por eso he decidido casarme con la playa- lo miré -Es lo mejor- sonreí

Giré mi rostro para mirarla cuando se tumbó a mi lado
-Es algo que no hay que esperar, simplemente llega.-le aconsejé.-Hey, juguemos al confiesa como cuando éramos niños.-propuse divertido, me refería a ese jugo en el que uno confesaba y hacia una pregunta para que el otro confesase si era cierto y preguntas etambién.-Yo empiezo...confieso que en noveno estaba loco por la delegada de tu clase...¿confiesas que te encantaba el capitan del equipo de baloncesto?-le sonreí, mi intención era distraerla y hacerla reir.

-Todos dicen lo mismo- puse mis ojos en blanco para luego escuchar su propuesta -¿El confiesa?- pregunté sonriente, ya había olvidado que ese juego existía, pero no sería para nada malo jugarlo -Uhmmmm, confieso que si, me encantaba, pero nunca se fijó en mi- suspiré -¿confiesas que tu fuistes el que me hizo la broma con mi vestido el día de la graduación?- ese día habían manchado el vestido que tanto amaba y usaría para la fiesta de graduación, los nervios se me habían puesto de punta, pero afortunadamente no era el mio, sino uno rentado, nunca supe quién había sido el de la broma, pero siempre sospeché de Mitch y sus amigos

Me reí.
-Confieso que...si fui yo...pero fue solo quería asustarte un poquito.-reí.-Estabas tan nerviosa, no sabía que llorarías...¿confiesas que tu fuiste quien le dijo a Ashley Simmons que me gustaba como venganza y la que me organizó la desastrosa cita sorpresa con ella?-le dije mirándola de reojo, habíamos quedado para ir al cine y cuando había llegado ella no estaba solo estaba...Simmons.

No pude evitar comenzar a reir como tonta -Confieso que si, fui yo, pero entiendelo, necesitaba vengarme de alguna forma y además hacían linda pareja- bromeé -Yo se que en el fondo te gustaba- reí -¿Confiesas que tu primer beso fue con Jane, la nert de la clase en el baño de niñas? muchas personas hablaron sobre eso y tu nunca me contaste como fue tu primer beso-